El alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, ha acompañado esta mañana a los representantes del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Huelva, Coaath, encabezados por su presidente, Rafael Luna, a la visita a las obras de rehabilitación del antiguo Cuartel de Santa Fe, enmarcada en las actividades culturales y técnicas organizadas con motivo de la celebración del 80 aniversario de la institución en la ciudad.
Un grupo de unos 15 profesionales, a los que se ha sumado el teniente alcalde de Urbanismo, Medio Ambiente y Transición Ecológica del Ayuntamiento de Huelva, han visitado el edificio actualmente en rehabilitación demostrando, ha señalado Cruz “el interés no sólo de los especialistas, expertos y técnicos, sino de toda la sociedad onubense en la recuperación de un edificio emblemático, que forma parte de nuestro patrimonio y que supone un proyecto ilusionante para los ciudadanos por su valor histórico y sentimental pero también por las enormes posibilidades que brindará para la organización de actividades culturales y sociales, integrándose en una ciudad que está demostrando que tiene vida y donde el Cuartel de Santa Fe se va a convertir en un hito, un elemento fundamental”.
Por su parte, Rafael Luna, en nombre de los aparejadores y arquitectos técnicos onubenses, ha felicitado al Ayuntamiento de Huelva por el respeto a la arquitectura original que están demostrando unas obras “donde llama la atención precisamente la poca intervención, para apostar por la conservación, destacando la actuación en fábrica de ladrillo visto y la estructura de hierro”. Luna, que se ha mostrado sorprendido “por la gran superficie del edificio” ha puesto en valor “la importancia de conservar los edificios singulares de la ciudad para ponerlos al servicio de los ciudadanos”.
EVOLUCIÓN DE LOS TRABAJOS
La visita ha servido además para evaluar el desarrollo de unos trabajos que en cuanto a la limpieza de la fachada y rehabilitación del ladrillo visto, ya han concluido en el lateral de la calle Velarde, instalando ahora el andamio en la Plaza Dos de Mayo, más conocida como de La Piterilla para continuar con una actuación que incluye la instalación de un tubo que recorrerá todo el perímetro del edificio para garantizar el drenaje de las aguas pluviales y evitar la formación de humedades.
Asimismo, actualmente se continúa trabajando en la parte abovedada del semisótano que da a la Plaza Dos de Mayo, donde se está replanteando el terreno para construir un pequeño edificio anexo destinado a alojar los ascensores y comunicaciones verticales. Será una estructura metálica de diseño, unida al edificio principal por una galería acristalada. Estas infraestructuras se han colocado en el exterior para respetar el edificio y no tener que romper la bóveda de ladrillo, uno de los elementos más característicos del edificio. En este sentido, se está hormigonando el muro del edificio anexo y ya se han terminado en el semisótano las instalaciones de luz, fontanería y contra incendios, comenzando con la tabiquería de los aseos.
En cuanto a la estructura de hierro, ya ha quedado totalmente limpia. Además, los 12 pilares de fundición se han reforzado con zapatas independientes de hormigón, mientras que el interior se ha cimentado con una losa.
También siguen avanzando los trabajos en el muro de la Iglesia de San Pedro, incluyendo las escaleras, que dan al Paseo Santa Fe y la calle Daoiz. Unos trabajos financiados al 100% por el Ayuntamiento de Huelva para una restauración que se está llevando a cabo con el mismo mimo y cuidado que la del edificio y consiste en una meticulosa limpieza del ladrillo visto, su reposición allí donde sea necesario con piezas expresamente fabricadas para conseguir la plantilla del ladrillo original y su color, lo más parecido a los originales, que se protegerá con una veladura muy sutil. Ahora se trabaja en las escaleras que dan hacia la calle Aragón. Hasta el momento se han desmontado las barandillas y los ladrillos, porque se va a reforzar la estructura con hormigón para volver a colocarlos.
EL PROYECTO
El proyecto se centra en la rehabilitación, consolidación y refuerzo del edificio, no en sus usos, siendo un proyecto muy versátil. Las obras comenzaron a principios del pasado mes de junio, cuentan con un plazo de ejecución de 12 meses y un importe de casi 3 millones de euros (subvencionados al 60% dentro del Programa 1’5% Cultural del Ministerio de Fomento).
Se trata de la primera fase de una actuación muy ambiciosa, que aborda la consolidación y rehabilitación del edificio, para continuar en una segunda fase con su adecuación funcional para su futuro uso sociocultural.
El proyecto de rehabilitación pretende devolver al edificio su estado original, potenciando el gran espacio diáfano interior, a la vez que se conserva su estructura metálica de cubierta, que es ejemplo destacado de arquitectura del hierro. Se trata de recuperar para la ciudad de un icono arquitectónico que atesora 117 años de historia, habiendo sido en su origen mercado de abastos, luego Escuela de Artes y Oficios; Escuela de Capataces de Minas, Biblioteca Popular, Museo de Pintura y, finalmente, cuartel policial.